Día proclamado por la Asamblea Mundial de la Salud de la OMS en mayo del 2007, con el objetivo de aumentar la visibilidad con respecto a esta grave enfermedad por parte del compromiso de alto nivel, gracias al cual desde el 2000 se estima que se han salvado unas 3,3 millones de vidas reduciendo el índice de mortalidad por esta causa a un 42% a nivel mundial y un 49% en el continente africano; y aún así recalcar que el objetivo es la erradicación total de esta enfermedad por lo que no hay que dejar de luchar y fortalecer las medidas para tal fin.