Día proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de diciembre del 2002 con el objetivo de concientizar sobre la importancia del diálogo, la diversidad y la inclusión pluricultural; y que la sociedad en primera persona adopte el compromiso de mejorar la cooperación y el entendimiento con personas de diferentes culturas, dejando de lado los estereotipos y barreras que surjan en la sociedad.